Durante las últimas dos décadas hemos sido testigos de varios brotes producidos por virus emergentes que han provocado epidemias de magnitud variable en todo el mundo y llevado a las autoridades sanitarias a establecer alertas para su control. Hablamos de agentes patógenos como los coronavirus responsables del síndrome respiratorio agudo y grave (SARS, por sus siglas en inglés) y del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS), virus causantes de la gripe aviar y la gripe A, y más recientemente el Chikungunya y virus del Ébola. Desde hace unas semanas ha surgido un nuevo protagonista en esta película, y no es otro que el virus Zika que ya ha afectado a miles de personas en varios países principalmente del continente americano.
El virus del Zika pertenece al género Flavivirus que engloba a patógenos causantes de enfermedades humanas muy conocidas como son el dengue, la fiebre amarilla o el chikunguña. La infección por el Zika produce una enfermedad generalmente leve en la cual los síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza, malestar generalizado, dolores articulares, conjuntivitis y exantema. Sin embargo, se está estudiando la posible relación entre la infección por este virus en mujeres embarazadas, especialmente durante el primer trimestre, y la posterior aparición de microcefalia congénita. Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) sospecha que podría existir una relación entre el Zika y ciertos casos del síndrome de Guillain-Barré, que da lugar a parálisis progresiva en las personas que la padecen, y otras enfermedades autoinmunes.
¿Cómo se transmite el Zika?
La transmisión de este virus se produce mayoritariamente a través de lo que se denominan vectores de transmisión que en este caso son mosquitos del género Aedes, que además son los mismos que transmiten otras enfermedades como el dengue y el chikungunya. Los mosquitos se infectan cuando se alimentan de la sangre de una persona infectada con el virus. A su vez, estos mosquitos infectados transmiten el virus a otras personas a través de las picaduras. Sin embargo, el virus del Zika se puede transmitir por otras vías como puede ser a través de transfusiones de sangre ya que el virus está presente en el torrente sanguíneo de las personas infectadas. En el momento del parto, una madre infectada puede transmitir la infección al recién nacido, aunque no es una vía de transmisión frecuente.
¿Se puede transmitir el virus del Zika a través de relaciones sexuales?
Esta es una cuestión interesante y la respuesta es afirmativa ya que se han descrito algunos casos en los cuales se produjo el contagio de personas sanas que habían mantenido relaciones sexuales con personas infectadas que provenían de zonas afectadas por el Zika. De hecho, se ha detectado el virus del Zika en el semen de hombres infectados y por tanto puede haber un riesgo de transmisión si se entra en contacto con este fluido. Aunque actualmente se están realizando investigaciones en esta dirección, parece lógico pensar que esta forma de transmisión es infrecuente dado el pequeño número de casos descritos hasta el momento. Además, hay que tener en cuenta que, a diferencia con otras enfermedades de transmisión sexual (ETS) como el VIH, la infección por Zika no se cronifica y los síntomas son en general leves.
En España, con fecha 1 de julio de 2016 se ha confirmado el primer caso de transmisión sexual de Zika. Este se ha producido en Madrid y la transmisión se ha producido desde un hombre que se contagió hace meses en un país latinoamericano. Esto sugiere fuertemente que el virus del Zika puede permanecer en el esperma durante un periodo de tiempo largo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que para evitar la transmisión sexual se use el condón en las relaciones sexuales durante las siguientes ocho semanas. Sin duda estos datos harán que el plazo recomendado se alargue aun más.
¿Puede haber una epidemia de Zika en España?
En España se espera que la mayoría de los casos de Zika sean importados, es decir de gente que proceda de las zonas afectadas por la epidemia. En los países del continente americano el vector de transmisión es la especie Aedes aegypti que no está presente en nuestro país, lo cual dificultaría la transmisión a la población. En determinadas áreas de la península está presente el mosquito tigre (Aedes albopictus) que podría actuar como vector de transmisión. Sin embargo, hay otros factores influyen en la transmisión del virus que sugieren que la transmisión es poco probable de forma similar a lo que sucede con otras enfermedades como el dengue o el chikungunya que también pueden ser transmitidas por el mosquito tigre.
¿Qué pruebas se utilizan para detectar el Zika?
Un alto número de infecciones por el virus Zika son asintomáticas por lo que no se llegan a diagnosticar. Cuando aparecen síntomas se pueden confundir con los provocados por infecciones por dengue o chikungunya lo que dificulta su diagnostico en base a la sintomatología.
Para realizar un diagnóstico de Zika se utiliza una muestra del paciente, principalmente sangre aunque se puede detectar el virus en otros fluidos corporales como orina o saliva. El método principal de detección es la amplificación de secuencias del material genético del virus mediante la reacción en cadena de la polimerasa en tiempo real (RT-PCR, de sus siglas en inglés). Gracias a la elevada sensibilidad de la PCR, se puede detectar la infección en fases tempranas siendo detectable el virus en los primeros días tras la aparición de los síntomas. En las pruebas de PCR se amplifican exponencialmente secuencias conservadas del genoma del virus. Esto permite generar millones de copias de la secuencia a partir de un pequeño número estas que son detectadas fácilmente en el laboratorio.
La detección de anticuerpos generados por el cuerpo del individuo infectado es posible por ejemplo mediante la técnica de ELISA. Sin embargo, las pruebas serológicas pueden dar falsos positivos por reacción cruzada con anticuerpos generados frente a infecciones por otros flavivirus como el dengue, el virus del Nilo Occidental y la fiebre amarilla.
En general, la detección de la enfermedad puede ser recomendable en mujeres embarazadas que tengan síntomas compatibles con la enfermedad del Zika, para que en el caso de dar positivo establecer controles ginecológicos y controlar la posible aparición de microcefalia.
Artículos relacionados: La PCR en el diagnóstico del virus del Ébola, Cinco razones por las que la PCR es la elegida para el diagnóstico del Ébola en España, ¿Cómo se diagnóstica la difteria?
Empireo. Elaboración propia.