Decir que los antibióticos salvan vidas puede parecer algo tonto a estas alturas. Pero aún tenemos datos científicos que nos sorprenden. Para bien. Porque siempre pensamos en los antibióticos cuando aparece una infección. Pero en países en vías de desarrollo, esa infección puede estar siempre presente y latente. ¿Podrían los antibióticos usarse de forma preventiva? La verdad es que suena contraintuitivo, pero un estudio reciente publicado en la prestigiosa revista New England Journal of Medicine indica que esto podría ser una realidad. De modo que, también ahora, los antibióticos salvan vidas.
Origen del estudio
El origen de este estudio, como tantas otras veces, fue casi una casualidad. La observación surgió de trabajos previos en los que se pretendía disminuir la infección por Clamydia trachomatis en varios países africanos. El tratamiento que se usó fue administrar el antibiótico azitromicina. Los resultados de esos estudios, además de evaluar el efecto sobre esa infección, mostraron que tratamientos muy puntuales con azitromicina disminuían la mortalidad infantil en niños menores de 5 años. Y entonces surgió la pregunta, ¿podría la azitromicina evitar infecciones si se administra de forma “preventiva”?
Datos del estudio con azitromicina
El ensayo clínico en cuestión se llamó AVENIR y evaluó el impacto de administrar azitromicina en dosis única, dos veces al año, durante cuatro años. Además, se diferenciaron dos poblaciones a los que se les administró el tratamiento, en función de su edad, siempre niños. Por un lado, los menores de 1 año, y por otro lado, los que tenían entre 1 y 5 años.
Se trata de un estudio a gran escala llevado a cabo en Níger durante 2 años. Fijaros que se incluyeron en torno a 400.000 niños, en los que se estudiaron tres tipos de tratamientos:
- Administración de azitromicina dos veces al año a menores y mayores de un año.
- Administración de placebo a todos los niños a menores y mayores de un año.
- Finalmente, administración de azitromicina a los menores de 1 año y placebo a los comprendidos entre 1 y 5 años.
El estudio confirmó que la administración de azitromicina dos veces al a niños menores de 5 años, disminuye un 14% la mortalidad infantil en esas poblaciones. Además, este efecto es mejor, cuando se incluye a todos los grupos de edad y no solamente a los menores de 1 año. Resumen, los antibióticos salvan vidas. Pero con la novedad de que puede que incluso antes de que haya una infección.
¿Conclusiones?
La primera es que a veces, no somos conscientes de lo afortunados que somos. Pensemos que durante el desarrollo de este estudio (4 años), fallecieron 5503 niños menores de 5 años. Ahí lo dejo.
La segunda es que este estudio abre la posibilidad a un uso preventivo de los antibióticos.
Y la tercera, es un pero. Siempre hay un pero. Y es que el estudio no aborda las posibles resistencias a azitromicina que puedan generarse por el uso masivo de este antibiótico. De modo que… seguiremos atentos.
Autor: CArlos del Fresno, @arlosdel
Fuente: New England Journal of Medicine